Por la educación que recibimos en México es casi seguro que tu programación mental esté controlada por la idea:"piensa mal y acertarás". Esa sola idea, además de muchas por el estilo, hacen que tu programación mental esté orientada hacia la limitación, la escasez, la carencia y la pobreza económica. No sería mucha exageración decir que tienes una mentalidad que produce problemas en lugar de producir soluciones, y a menos que la cambies siempre vas a batallar mucho más de lo necesario, llegando a creer que la vida bonita no es para tí. Tu mente, funciona en base a tres niveles:
Mente consciente.- es la que opera cuando estamos en el estado de vigilia y se encarga de ubicarnos en la realidad del momento y en tomar decisiones para permitirnos funcionar adecuadamente en el aquí y en el ahora. Es analítica y trabaja en una forma lógica y secuencial. Sólo puede retener información entre 5 y 10 minutos.
Mente subcosciente.- Es la
parte emocional de nuestra mente. Toma alrededor de 95% de las
decisiones generando emociones que condicionan nuestro
comportamiento. Establece condiciones neuronales duraderas que se van
fortaleciendo a través de la repetición de ideas y comportamientos.
Tiene acceso a todos nuestros recuerdos y es muy influenciable a
través situaciones emotivas.
Es la que nos permite
estar en comunicación con la Inteligencia Infinita y tener acceso a
la información universal almacenada en los registros akashicos. No
funciona en base al tiempo y al espacio y se encarga de todos los
comportamientos paranormales como telepatía, telequinesis, visión
remota, dones de curación, etc.
Mente inconsciente.-
Controla las respuestas automáticas ante el peligro y algunas
funciones corporales esenciales como la respiración, los latidos de
corazón y la presión arterial y los sistemas hormonal e
inmunológico.
Guarda las motivaciones
básicas comunes a todos los seres humanos, lo que Carl Jung llamó
arquetipos. Estos acaban siendo patrones de conducta universales que
le dan sentido a nuestra realidad diaria sin importar la cultura o el
entorno social de la persona.
El cerebro es un
dispositivo electromagnético: las neuronas generan ondas de
diferentes frecuencias como resultado de su actividad, que se basa en
la transmisión y recepción de electrones. Ahora, se ha descubierto
que son estas ondas las que permiten que diferentes zonas del cerebro
se comuniquen entre sí y con el medio que nos rodea ya que funciona
como una estación que puede transmitir y recibir ondas
electromagnéticas.
El psiquiatra alemán, profesor de la
Universidad de Viena, llamado Hans Berger (1843-1941) demostró con
un aparato "amplificador" al que se bautizó como
electroencefalógrafo que existían en el cerebro ondas
electromagnéticas de diferentes
frecuencias. Cada tipo de onda modifica el funcionamiento
psicológico y físico de nuestro cuerpo.
Es decir, nuestra mente, nuestro cuerpo
y nuestra actividad física y fisiológica es completamente diferente
en cada uno de estos estados o frecuencias. Se
sabe actualmente que existen 4 frecuencias diferentes: ondas betha,
alfa, theta y delta.
También se ha comprobado
que el corazón humano es el órgano que genera el campo
electromagnético de mayor fuerza que cualquier otro órgano en el
cuerpo humano pudiendo medirse a más de 1 mt fuera del cuerpo. Este
campo cambia con las emociones y es donde se realiza la comunicación
con el Universo.
Esta comunicación se
facilita cuando existe coherencia entre el campo del cerebro y del
corazón. Esta coherencia sucede cuando se tienen pensamientos
positivos centrados en la paz y en la energía divina del amor. En
estos casos se generan vibraciones sanadoras para el cuerpo de la
persona y quienes la rodean. Siempre están involucradas en los
procesos de sanación milagrosa.
La mente subconsciente es
la consola de control para comunicarnos con la mente infinita, el
corazón físico es el amplificador y el cuarto chakra, que llamamos
corazón es la antena. Para que el proceso funcione nuestra mente
consciente, que sería el operador, se tiene que conectar con el
subonsciente para que codifique nuestro mensaje a la inteligencia
infinita. El idioma que entienden el subconsciente y la inteligencia
infinita es de las vibraciones, no las palabras.
La manera más fácil de
generar las vibraciones correctas es a través de imagenes que
generen las emociones que sentiriamos al recibir lo que pedimos. Por
eso en nuestra vida diaria siempre tenemos situaciones muy similares
a las que imaginamos continuamente. Esas imágenes generan
vibraciones que sentimos como emociones y que son las instrucciones
que enviamos a la inteligencia infinita que luego se materializan en
la realidad física.
Mientras más definidas y
de mayor intensidad son las vibraciones que producimos más fácil
será sintonizar con esas cosas que deseamos porque ellas ya existen
en el campo cuántico o inteligencia infinita como vibraciones que se
manifestarán gracias a la energía que nosotros estamos produciendo.
En física cuántica se llama a eso colapsar la función de onda y en
el lenguaje espiritual se habla de materializar o manifestar, porque
la energía que estaba como ondas se convierte en partículas
físicas.
Cuando mantenemos una
vibración en forma constante la mente subconsciente considera que la
vibra es el patrón que debe reproducir en nuestra realidad física
organizando nuestros recursos para que produzcan las condiciones y
acontecimientos que manifestarán la situación que produciría la
reproducción de la vibra recibida. Debemos recordar que la
realidad visualizada es tan real como la realidad física; la única
diferencia es que todavía no tiene materia. Podemos repetir la
visualización unas 5 veces al día en períodos de 2 o tres minutos
cada vez.
Cómo puedes ver, de todos estos asuntos aprendemos muy poco durante nuestra infancia y adolescencia y por eso nuestra vida se va complicando y llenando de situaciones desagradables a medida que nos vamos convirtiendo en adultos. Cómo nuestra computadora ya trae un diseño que no podemos cambiar, trabajará según la programación que hallamos recibido.
No puedes cambiar el funcionamiento cerebral, pero si puedes cambiar la programación que recibiste que define como trabaja tu mente, y de ahí la importancia de aprender como hacer eso. En el taller hablaremos en detalle de estás cosas que aquí sólo he mencionado y de muchas otras que es fundamental que sepas si quieres renunciar a ser miembro honorario del Club de la Lágrima Perpetua y del Sufrimiento Agudo. Por eso te invito a ver el video promocional del taller; y sobre todo, a que te comprometas contigo mismo(a) a producir la mejor versión de tí.
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