Normalmente pensamos que el Reino de Dios en un lugar en alguna parte de esta galaxía en donde podremos vivir una vida llena de gozo y sin problemas después de la muerte, siempre y cuando nos hayamos portado bien... nada más lejos de la realidad. Necesitamos caer en cuenta que segun las enseñanzas de Cristo el Reino de Dios NO ES UN LUGAR, es una forma de vivir en justicia, paz y alegria (Rom. 14:17) al que podemos tener acceso antes de pasar por la muerte física.
Al ser parte del Reino de Dios, no por nuestra manera de rezar, sino por nuestra manera de vivir, tenemos la posibilidad de recibir el apoyo directo de la Inteligencia Infinita para sacar adelante nuestros proyectos de vida. Ser parte del Reino de Dios asegura tener acceso al poder de Dios para que logremos tener una vida plena y feliz, con todo y los problemas de la vida diaria. Normalmente la felicidad es un estado emocional SIEMPRE POSPUESTO PARA EL FUTURO, porque nos ha dicho que la felicidad es "ausencia de problemas" y vida fácil, lo cual tampoco es cierto.
Para formar parte de ese Reino de Dios necesitamos estar dispuestos a dejar el círculo de confort en el que nos hemos acostumbrado a vivir, para estar siempre en un proceso de cambio que nos lleva a desarrollar nuestras capacidades. Implica ir por la vida viajando "livianos", sin apegos, sin el peso del pasado, con la mente abierta a aprender y las acciones orientadas hacia un futuro cada vez mejor. Por eso el camino al Cielo es "angosto y pedregoso"; implica crecimiento constante y una disposición al aprendizaje muy grande. Esto implica movimiento, implica no echar raices en "modos de ser" que se vuelven hábitos muy difíciles de romper, y que acaban siendo cadenas que nos inmovilizan.
Si estás dispuesto(a) a esta tarea y te dejas guiar por las enseñanzas de Cristo entonces seguramente alcanzarás una vida muy productiva para tí y para quienes te rodean... podrás comprobar todos los beneficios de vivir en el Reino de Dios. Si estás en este proceso comparte tus experiencias con nosotros porque seguramente tu viviencia nos puede servir a otros.
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